Alimentación y cocina, Logística y distribución

¿Cómo conservar los alimentos en la nevera?

03 Junio 2021

La conservación de alimentos en la nevera resulta imprescindible en la mayoría de casos, sobre todo en épocas estivales como la actual. No obstante, el orden y la localización, así como la cantidad de alimentos y productos que se dispongan dentro de los frigoríficos interfiere en su correcta conservación.

Por este motivo, en el siguiente artículo os dejamos algunos consejos para que sepáis cómo distribuir los alimentos en vuestra nevera y, sobre todo, cómo conservarlos de forma correcta. Todo ello teniendo en cuenta la buena eficiencia del electrodoméstico y el ahorro de energía.

5 consejos para conservar correctamente alimentos en la nevera

Los trucos no son nada complicados y cualquiera los puede realizar. Las bases son el orden, la higiene y el sentido común, el resto es lo siguiente:

Ordena los alimentos en la nevera según los siguientes criterios:

Estantes superiores: conservar los quesos curados, los pasteles y los alimentos ahumados.
Baldas de la parte media de la nevera: para productos lácteos, como yogures, quesos frescos y crudos, y alimentos cocinados o semielaborados.
Estantes inferiores: depositar alimentos crudos y perecederos. También los productos que vayamos a descongelar, pero siempre en envases cerrados.
Cajones de la parte baja del frigorífico: depositar frutas, verduras e ingredientes para ensaladas. Si se dispone de dos filas de cajones, incluir en la inferior, las carnes y los pescados.
Puerta de la nevera: dividirla en tres franjas. En la primera y superior, incluir la margarina, mantequilla y mermelada. En la del medio, los aderezos o salsas. En la más baja, las botellas de agua, bebidas y leche.

Guarda los alimentos más perecederos en bandejas tapadas, tuppers o cajas de alimentación:
Dentro de esta categoría se incluyen las sobras, los alimentos descongelados, los alimentos frescos, entre otros. En Envaseonline ofrecemos productos de almacenamiento y conservación que pueden ser muy útiles:

Cestas hortofrutícolas.
Tarrinas con tapa.

Conservar la cadena de frío de la nevera:
Para ello, hay que intentar no meter alimentos calientes en la nevera, ya que no solo afectaría a la temperatura adecuada del electrodoméstico, también a la conservación del resto de alimentos y al rendimiento energético del aparato.

Al fin y al cabo, si la temperatura se ve alterada, el frigorífico deberá trabajar más para regular sus grados ambientales. Esto requerirá más electricidad y un sobre esfuerzo de la máquina, haciendo que su vida útil merme.
Mantener el orden y la limpieza del frigorífico:
Este punto evitará la acumulación de suciedad y su correspondiente generación de bacterias y microbios. Por ello, se recomienda que una vez por semana se revise la calidad de los alimentos que hay dentro de la nevera. Hay que desechar los que no estén en buenas condiciones.

Asimismo, la limpieza de la nevera también evitará que se acumulen en exceso alimentos y productos dentro de la misma. Esto hará que el electrodoméstico funcione de forma mucho más óptima y no se vea obligado a forzar su maquinaria para enfriar su ambiente.